El presidente iraní, Ebrahim Raisi, ha regresado de una gira por América Latina, donde ha firmado decenas de acuerdos con tres aliados que comparten el desafío de Teherán a las potencias occidentales. El presidente iraní, que estuvo acompañado por sus ministros de Asuntos Exteriores, Defensa, Petróleo y Sanidad, llegó el viernes a Teherán tras un viaje de cinco días que le llevó a Venezuela, Nicaragua y Cuba. A lo largo del viaje, Raisi criticó a Estados Unidos y las sanciones económicas impuestas a Irán y a sus aliados en América Latina. «Las relaciones entre Irán y Venezuela no son relaciones diplomáticas normales. Son estratégicas», dijo Raisi en Caracas, donde fue recibido calurosamente por el presidente Nicolás Maduro. «Las naciones de Irán y Venezuela tienen enemigos comunes, que no desean que vivamos de forma independiente», dijo en referencia a Washington.
Los dos países firmaron más de dos docenas de acuerdos. Varios de ellos estaban relacionados con la energía, incluidos acuerdos sobre el desarrollo de una plataforma petrolífera y una planta de productos petroquímicos, mientras que también se firmaron acuerdos sobre transporte marítimo, agricultura, medicina, tecnologías de la información, seguros y lazos culturales. Irán y Venezuela firmaron el año pasado un plan de cooperación de 20 años durante una visita de Maduro a Teherán. Los dos presidentes dijeron esta semana que sus nuevos acuerdos están en línea con una mejor implementación del plan. Raisi dijo en Caracas que el volumen del comercio bilateral anual asciende actualmente a más de 3.000 millones de dólares y que los dos países pueden aumentarlo a 10.000 millones de dólares a medio plazo en su camino hacia un objetivo de 20.000 millones de dólares.
Maduro dijo que quiere instalar un busto de Qassem Soleimani, un general iraní que fue asesinado en un ataque de aviones no tripulados de EE.UU. en Irak en enero de 2020, en el lugar de descanso de Simón Bolívar, un líder militar y político venezolano que llevó a partes de América Latina a la independencia del dominio colonial español hace dos siglos. Los elogios a Soleimani y los ataques a Washington continuaron en el siguiente destino de Raisi, Managua. Junto a Raisi, el presidente nicaragüense, Daniel Ortega, dedicó varios minutos de su discurso a Soleimani, tras lo cual ambos líderes guardaron un minuto de silencio por el general.
«Rendimos homenaje junto a nuestros héroes y mártires a todos los héroes y mártires de Irán, en particular al general Qassem Soleimani, asesinado por el imperialismo yanqui cuando luchaba contra el terrorismo», dijo Ortega. El presidente iraní arremetió contra las sanciones que Washington ha impuesto a Irán y Nicaragua tras el colapso del acuerdo nuclear iraní de 2015 y la represión contra la oposición nicaragüense. «Estados Unidos quería paralizar a nuestro pueblo con amenazas y sanciones, pero no lo ha logrado», dijo Raisi, quien también se dirigió posteriormente a la Asamblea Nacional de Nicaragua. Los dos presidentes firmaron varios acuerdos en materia de cooperación económica y comercial y en el sector sanitario, según los medios estatales iraníes.
En la última etapa de su gira, el presidente iraní viajó a La Habana. Fue recibido por el presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, quien prometió reforzar el compromiso político con Teherán. «Cuando el presidente de Irán viene a nuestro país en estas condiciones de sanciones contra la nación de Cuba, refuerza nuestra fe y nuestra creencia en Irán», dijo. El presidente cubano también prometió visitar Teherán este año, afirmando que hacía tiempo que se preparaba un viaje, pero que la pandemia del COVID-19 y otros problemas lo habían impedido. Los dos países firmaron seis acuerdos, entre ellos una hoja de ruta para la cooperación política. El ministro de Sanidad iraní, Bahram Einollahi, declaró que la gira había supuesto «uno de los mayores logros del sagrado establecimiento de la República Islámica de Irán en el sector sanitario», ya que Irán y los tres países acordaron establecer un grupo de trabajo conjunto de cooperación sanitaria.
Afirmó que Irán, que dice producir casi todos los medicamentos que necesita, exportará fármacos y equipos médicos a Venezuela y Nicaragua, al tiempo que se propone impulsar la colaboración universitaria con los tres países. En La Habana, Raisi y el ministro iraní de Asuntos Exteriores, Hossein Amirabdollahian, también se reunieron con el ex presidente Raúl Castro. Washington no comentó directamente el viaje de Raisi. En cambio, el portavoz del Consejo de Seguridad Nacional, John Kirby, reiteró que Estados Unidos está preocupado por el «comportamiento desestabilizador» de Irán y seguirá tomando medidas para mitigarlo. María Elvira Salazar, presidenta del Subcomité para el Hemisferio Occidental de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, declaró a Fox News que el viaje de Raisi demuestra el fracaso de la política del presidente Joe Biden en Latinoamérica. En su opinión, «ha permitido que los peores actores del mundo penetren impunemente en nuestro hemisferio».