El visionario empresario Elon Musk, con su característico optimismo, ha compartido sus esperanzas de que Neuralink, su compañía de neurotecnología, pueda comenzar pruebas con humanos antes de que finalice el año. Hizo tal revelación durante su aparición en el evento tecnológico parisino, VivaTech. Musk insinuó que Neuralink tiene en mente a un paciente con paraplejia o tetraplejia para la transmisión en vivo del primer implante de chip. Sin embargo, Musk no proporcionó detalles sobre el número de pacientes o la duración de las pruebas, solo sugirió que «el primer caso parece que se producirá a finales de este año». Musk, cuyo repertorio empresarial incluye la dirección ejecutiva de Tesla, Twitter y SpaceX, siempre sorprende con sus metas ambiciosas.
En una victoria para la empresa, Neuralink anunció el mes pasado que la Administración de Alimentos y Medicamentos de EE.UU. (FDA) había dado su consentimiento para el primer ensayo clínico en humanos. Esta aprobación marca un hito crucial para Neuralink, que ha estado bajo escrutinio en los Estados Unidos por sus prácticas de experimentación animal. La FDA confirmó la autorización para que Neuralink use su implante cerebral y su robot quirúrgico en las pruebas, pero se abstuvieron de proporcionar más detalles. A pesar del avance, Neuralink tendrá que demostrar que su dispositivo es seguro para su uso en humanos, lo que podría llevar varios años, tal vez incluso más de una década, antes de obtener la autorización para su comercialización. Neuralink no está solo en la carrera, ya que compite con otras empresas de neurotecnología que ya han implantado sus dispositivos en personas.
Musk ha sido conocido por no cumplir con los plazos que anuncia públicamente sobre Neuralink. Desde 2019, en al menos cuatro ocasiones, Musk ha pronosticado el inicio inminente de los ensayos en humanos. La empresa, creada en 2016, presentó por primera vez una solicitud de autorización de la FDA en 2022, pero fue denegada por una serie de razones de seguridad, como la batería de litio del implante, la posibilidad de migración del cable dentro del cerebro y la dificultad de retirar el implante de forma segura sin lesionar el tejido cerebral. Además, Neuralink está bajo vigilancia federal después de informes sobre sus experimentos con animales.
El año pasado, Neuralink enfrentó críticas por realizar cirugías apresuradas en monos, cerdos y ovejas, provocando una cantidad innecesaria de muertes de animales, mientras Musk presionaba al equipo para obtener la aprobación de la FDA. Los datos recopilados en estos experimentos con animales fueron destinados a respaldar la solicitud de la empresa para los ensayos en humanos. En 2021, Neuralink implantó dispositivos de tamaño incorrecto en 25 de 60 cerdos, que luego tuvieron que ser sacrificados, un error que los empleados sostienen que se podría haber evitado con una mayor preparación. En mayo, los legisladores de EE. UU. instaron a los reguladores a investigar si la composición del comité de Neuralink que supervisaba los ensayos con animales había contribuido a los errores y precipitaciones en los experimentos debido a posibles conflictos financieros en el consejo.
Con el fin de averiguar si Neuralink transportó indebidamente infecciones nocivas en chips extraídos de cerebros de mono sin los métodos de contención requeridos, el Departamento de Transporte está iniciando una investigación independiente. Un portavoz de la agencia anunció el viernes que la investigación aún está en curso. Además, Neuralink está siendo investigada por la Oficina del Inspector General del Departamento de Agricultura de EE. UU. por posibles infracciones de bienestar animal. Esta investigación se ha centrado en la supervisión de Neuralink por parte del USDA.
A pesar de las controversias, la valoración de la empresa ha subido de manera significativa en los últimos meses. La compañía, que se valoró en unos 2.000 millones de dólares hace dos años durante una ronda de financiación privada, ahora tiene un valor de alrededor de 5.000 millones de dólares, según las transacciones privadas de acciones. Los empleados de Neuralink que forman parte de la junta directiva de la empresa, que ha sido objeto de escrutinio federal por posibles conflictos financieros, han sido beneficiados por el rápido desarrollo del implante. Las acciones de Neuralink que poseen algunos de los empleados han aumentado alrededor de un 150% en solo dos años, de acuerdo con las transacciones secundarias.